A diferencia de aquellas realizadas dentro de la misma ciudad, o incluso en el propio país, una mudanza internacional requiere de mucho cuidado. Se trata de un gran paso, por lo que planearlo bien es una necesidad.
En muchos casos, para que una mudanza internacional sea efectiva, se necesita conocer lo que se hará antes, durante y después que esta haya finalizado.
Pensando en esto hemos diseñado los siguientes consejos que podrán ayudarte a que tu mudanza internacional sea exitosa:
- Protección de los bienes
Es necesario establecer un método de protección de los bienes que serán llevados en la mudanza internacional. Una buena opción es elegir una empresa que incluya un seguro, lo que garantizará que se harán responsables en caso de pérdida o si se sufre algún daño.
También es necesario saber exactamente que se llevará en el viaje. Si se cuenta con un listado de los objetos a transportar, mucho mejor.
Finalmente, también es importante separar a aquellos de mucho valor, como el caso de las joyas, de otros que no lo son. Utilizar un equipaje propio para ello, que esté bajo supervisión propia es una gran ayuda. Así estarán al alcance de la mano en caso de imprevistos.
- Documentos y papeles importantes
Al viajar es importante tener a mano los documentos de mayor relevancia que serán necesarios. Estos incluyen títulos de propiedad, para los bienes, pero también lo referente a pasaporte, tarjetas de identidad, cartas de invitación en caso de que se necesiten, etc.
En el caso de que la mudanza sea definitiva, otros documentos importantes incluyen los títulos universitarios, notas, diplomas; esto ayuda en caso de que se planee seguir estudiando. Todo esto debería ir en un bolso específico para evitar pérdidas.
Un último tipo de documento importante son las fotografías. Si se pueden digitalizar, entonces mucho mejor. En caso de que no, será necesario utilizar sobres o carpetas específicas que no ocupen mucho espacio.
- Revisar que todo esté bien
Una vez se haya llegado al destino de la mudanza internacional, es necesario revisar si todo está en orden. Esto abarca los bienes transportados, los papeles importantes y cualquier objeto de valor que pudo haberse quedado en el viaje.
Si se sufrió alguna pérdida, entonces se deberá avisar a la empresa contratada o incluso a los encargados del viaje, como las aerolíneas si se viajó en avión.